sábado, 16 de marzo de 2013

La sombra


Indagando por la red, encontré un leyenda de lo más terrorífica y como no, debía compartirla con todos ustedes.
Se lo que sea, que depare el destino hay va:

La Sombra.


Hola, me llamo Daniel, vivo en Jaén y quiero contaros lo que me ocurrió hace varios años en casa de mi abuela. Bueno, yo tenía trece años y mis padres tenían que irse a Sevilla con mi hermana para ver a sus amigos, yo prefería quedarme en casa de mi abuela, allí pasó todo... era verano día 12 de agosto y a mi abuela la llamaron mis tíos para que fuera a recoger algo. Me quedé solo y decidí llamar a mis amigos, como estaba solo... Llame a mi amigo Gabi, a Cristina y a mi amigo José. Nos quedamos toda la noche viendo una película y a Cristina le dio por explorar la casa de mi abuela.
-Voy a mirar un poco esta casa, ojalá tuviera una igual - dijo Cristina
-Vale, y no toques nada que si me descubre luego mi abuela...- le dije
Pasaron varios minutos y Cristina no volvía, estaba oscuro y teníamos miedo de subir a ver que había pasado con ella.
- Yo subo caguetas - dijo José
Pero el tampoco volvía y Gabi y yo empezamos a asustarnos ¿que había pasado?
Cuando intentamos subir por las escaleras al piso de arriba yo apagué la luz de arriba para que Gabi se asustara, entonces vi delante de él como pasaba una sombra al piso de arriba. Era alta y uniforme y no se parecía a Cristi ni a José. Empezamos a gritar porque la sombra se nos acercaba y un impulso me llevó a encender la luz. La sombra desapareció casi instantáneamente.
En ese momento alguien llamó a la puerta, bajamos corriendo y la abrimos. Era mi abuela que venía de la mano de un hombre alto y robusto con un chaleco arrugado ¿era nuestra \"sombra\" aquel hombre tan alto? Mi abuela dijo que había encontrado en la calle dos niños de mi edad helados y aquel hombre que pasaba por allí le ayudó y los metió en el coche de mis tíos que venían detrás. Gabi y yo asustados fuimos al coche y vimos en la parte de atrás a José y a Cristina con la cara helada y blanca y las manos como si las hubieran metido en un iceberg, moradas. Temblaban y solo supieron decirnos \" ha.....sido....la sombra\"
Actualmente mi abuela está diariamente en el psiquiatra por un problema psicológico y solo les dice a los médicos \"Ha sido la sombra\" y sufre los mismos síntomas que sufrían José y Cristina. Ellos están recuperados y poco a poco intento sonsacarles que fue lo que les pasó. Me siento muy afortunado de que la sombra no nos alcanzara a mí y a Gabi. Aunque siento curiosidad, ¿qué nos abría pasado de no haber encendido la luz? ¿Y quién era ese hombre?


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